Acabo de terminar Volver de Toni Morrison, la última publicación de la primera afroamericana que recibió el Nobel en 1993. Desde entonces toda una legión de premios en una dilatada carrera. A mis ochenta y un años, me siento atenta, vital, yo diría que espléndida…cuando escribo. Qué maravilla poder escribir y sentir así a estas edades. Cuanta sabiduría e ilusión por la vida. Sin duda un ejemplo.
Volver es la historia de un veterano que vuelve a sus raíces mendigando cariño y olvido. Frank es uno de los muchos licenciados tras la guerra de Corea que vuelve cargado de pesadillas a su tierra. Al llegar descubre que Cee, su única hermana, abandonada por un marido que la explotaba, está en manos de un médico sin escrúpulos. La cruzada para rescatarla le enfrentará con sus demonios y le devolverá la vida.
A través de la ventanilla, bajo la piel de nieve, el paisaje se volvió más melancólico cuando el sol logró iluminar los árboles, mudos, incapaces de hablar sin hojas.
La lectura sorprende con imágenes cargadas de fuerza, metáforas en las que no sobra ni una coma, diálogos brillantes. Continuando con los temas que siempre le han interesado, la lucha contra la discriminación racial y el abuso a las mujeres, Toni Morrison nos hace disfrutar con el buen hacer de una maestra. Toda una lección de literatura. Volver, una buena ocasión para redescubrir a esta gran autora.
– ¿Has estado en la guerra?
– He estado en la guerra.
– ¿Has matado a alguien?
– Tuve que hacerlo.
– ¿Qué se siente?
– Te sientes mal, muy mal.
– Eso es bueno. Que te sintieras mal. Me alegro.
– ¿Y eso?
– Significa que no eres un mentiroso.
– Eres muy inteligente Thomas. – Frank sonrió- ¿Que quieres ser de mayor?
Thomas giró el picaporte con la mano izquierda y abrió el picaporte.
– Un hombre- dijo y salió.
Volver. Toni Morrison. Traducción: Amado Diéguez. Editorial Lumen. Barcelona. 2012. 159 págs.
Encontrar personas tan vitales y frescas mentalmente pasados los ochenta es todo un motivo de esperanza en el futuro que nos resta, seguro que merece la pena leer éste libro.¡me lo apunto!.
Un Abrazo 🙂 .
By: joaquinsarabia on 26/03/2013
at 12:23
Ya me gustaria a mi ser capaz de escribir la mitad de bien con esos años, y ya puestos, llegar a los 80 con tanta energía. Un saludo.
By: Concha Huerta on 29/03/2013
at 18:38
No te creas que me entusiasma mucho esta autora. Hay escritores que se merecían más el Nobel que ella, pero como era mujer y negra y luchaba contra la discriminación racial, pues le dan un premio literario. La corrección política, en mi opinión está haciendo mucho daño a la cultura y a todo. No dudo, no obstante, de la calidad de este libro.
By: zambullida on 26/03/2013
at 13:17
Creo que los Nobel siempre son complicados. hay muchos autores que sorprende que no lo hayan recibido, pero también sirve para difundir la obra de algunos desconocidos de calidad. En fin, a mi el libro me ha gustado. Un saludo
By: Concha Huerta on 29/03/2013
at 18:39
Que belleza de mujer con tantoamor hacia la vida. Gracias querida amiga. besos Rub
By: rubengarcia on 27/03/2013
at 2:19
Todo un ejemplo. Saludos
By: Concha Huerta on 29/03/2013
at 18:39
Me maravilla la gente mayor capaz de tener la ilusión de crear y la fuerza de llevar su ilusión a cabo. Así se conservan… todo un ejemplo. Gracias por la reseña.
Un abrazo
By: annefatosme on 28/03/2013
at 17:25
Tienes razón. Yo también creo que la clave de la juventud es la ilusión. un saludo
By: Concha Huerta on 29/03/2013
at 18:40
Sigo de cerca la literatura estadounidense, pero debo confesar que a Morrison no la he leído aún. En lo personal creo que Joyce Carol Oates, ya merece el Nobel. El breve fragmento de conversación es muy poderoso.
By: minicarver on 28/03/2013
at 18:23
Me alegra que te guste. Es un ejemplo de como construye voces potentes. Un saludo
By: Concha Huerta on 29/03/2013
at 18:41
Para mi independientemente de su riqueza como escritora, un ejemplo de mujer. Su superación la llevó a dar a conocer a su comunidad ampliamente, y lograr el máximo galardón.Difíl debe ser triunfar siendo una mujer pobre y negra. En ella se felicita la vida.
By: Stella on 29/03/2013
at 17:20
Es un ejemplo de tesón y constancia frente a la adversidad. Un saludo
By: Concha Huerta on 29/03/2013
at 18:41