Comienza el año, se terminan las fiestas. Vuelve la rutina de reuniones, citas y teléfonos. Las listas que nunca se terminan. Intento mantener la resolución para este año de levantarme y dedicarle un tiempo a la meditación pero la mayoría de los días desayuno y salgo corriendo.
Jueves, 14, ayer estrenamos Congreso con algún bebé en los escaños. Fallece Alan Rickman, unos de mis actores favoritos, Juicio del Madrid Arena, el responsable no sabía que tuviera que tener ningún médico, qué pena de noticias. Otro «gol de oro» a Messi, el quinto, el de Rosario sí que estará contento. Yo volviendo a preparar maletas. Que rápido pasaron estos cuatro días en Madrid.
Llego a casa empapada, salí esta mañana sin paraguas y con las manos frías. Llegó el frío. Y más que me espera en Londres. Botas, plumas, ropa interior térmica. Más que a una capital parece que fuera a esquiar a la sierra. Parece que por fin llegó el invierno, que con el cambio climático se retrasó no se cuantos días. En diciembre alcanzamos los 15 grados en Londres.
Del cambio climático, mejor ni hablamos. Cumbre de París, resoluciones en una eterna lista de espera. París cambiando todas sus bombillas. Pero de las calefacciones, coches e industrias se habla menos. Y el petroleo cada día más barato. ¿Sera el 2016 un buen año para el futuro de la Tierra? Y tú, ¿qué resoluciones has tomado para este año?
Madrid, 13-1-2016. Foto: C. Huerta
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