Sábado, 19:30. Cansada de esperar un taxi camino hasta casa de mis padres a pesar del frío. Me sorprenden las calles vacías y una columna de humo. Encuentro la plaza de Colon inundada de carrozas, hadas y piratas y a Don Carnal sobre un dragón y cuatro corceles blancos. Fuegos, música. Madrid vestida de Carnaval por unas horas. Yo lo celebré en Cascáis sobre la hierba.
Golf de Oitavos, 8:30 de la mañana. Recojo mi tarjeta envuelta en una capa mágica y una máscara veneciana. Abajo esperan buggies con globos multicolores. Imagen inusual en un deporte que se rige por la etiqueta. Me acerco a un grupo de comparsas. Un payaso me saluda efusivo, mientras que una Escarlata y una piel roja organizan las salidas. Orangutanes, mujeres-sol, chicas ye-ye, punks y hasta un Gaddafi. La imaginación de las Burners y sus amigos en su torneo de marzo.
Comparto buggy con Pocahontas y juego con un comando de metro noventa y un piloto en medias y minifalda negra. Qué espectáculo verle arrastrar los palos con la determinación de Thelma. Intentamos concentrarnos en el juego pero se nos escapan las risas. Pocahontas enlaza drivers potentes y directos y consigue el más largo del torneo. Mis palos se transforman por arte de magia y me regalan un par en el 7. Comando desenfunda su cámara y documenta nuestras hazañas entre las dunas y el Atlántico.
Thelma encuentra varias bolas imposibles. Este chico es una joya. El pobre se pasa la mañana peleándose con los rizos. En el 18 se los recoge con un pañuelo y lanza una bola increíble hasta la cabecera del green. Después, convertimos el buggy en una guagua y nos trasladamos al 1 cantando. Atravesamos el putting green cubierto de mesas y caipiriñas que esperan a los que terminen. Una jugadora solitaria alucina al vernos llegar a la salida. Estoy segura que le habría encantado unirse a nuestro grupo. Risas y deporte. El mejor coctel para una mañana de carnaval.
Barbara Landry. Still Life.
Torneo de Carnaval de las Burners en Oitavos Dunes. Guincho. Portugal.
Desde luego, menudo cóctel para una entrada de una mañana de carnaval. Has plasmado perfectamente el ambiente. Estaba allí, a tu lado, viendo todos esos personajes… un poco ciertos y un poco falsos.
Saludos, y sigue disfrutando.
By: Alan Rulf on 07/03/2011
at 11:50
Yo todavía no reconocí a algunos y lo curioso es que los más tímidos se soltaron en la piel de ese otro personaje. Un saludo.
By: Concha Huerta on 07/03/2011
at 21:39
La fiesta, el color, el deseo de sepultar al mal humor. El disfraz todo se mezcla y resulta vivencial leerte. Un abrazo querida amiga Rub
By: rubengarcia on 07/03/2011
at 15:50
Romper con las estrictas normas que marcan este bello juego aunque solo sea por un día. Que relajante.
By: Concha Huerta on 07/03/2011
at 21:39
Concha, te felicito me llevaste a ese lugar como por arte de magia…, estupendo y bello relato…
Muy bueno¡
Un beso
Cruz del Sur
By: 1cruzdelsur on 07/03/2011
at 18:37
Sera por mis palos transformados en varitas mágicas. Un saludo y gracias por apuntarte.
By: Concha Huerta on 07/03/2011
at 21:40
Muy divertido! Me ha encantado, has sabido recrear un ambiente y transportarnos allí, una delicia! La caipiriña me ha sabido escasa.
Un abrazo,
By: annefatosme on 07/03/2011
at 21:50
Anne que rápida!. Me alegro que hayas sonreido y saboreado esa caipirinha matutina. Imagina como acabamos el día. Un saludo
By: Concha Huerta on 07/03/2011
at 21:58
Pense que el Golf era un deporte muy formal, tradicional. Veo que he estado equivocado -o no-, el caso es que resulta interesante ver como Pocahontas le pega tan bien y el Comando se mantuvo seguro desde su estatura a pesar de las caipirinhas.
Un saludo Concha, interesante imagen para mi mañana de cafe con leche frente a un mar calmo
By: Javier Revolo on 08/03/2011
at 6:13
Me alegra que nuestro juego tan divertido te haya distraído. Que bueno poder compartir la alegría a través de la nube. Saludos.
By: Concha Huerta on 08/03/2011
at 10:17
Este texto es una maravilla !!!
Me ha encantado recordar esta jornada tan divertida que sorprendente.
Me he dado cuenta mas tarde, al recordarla, que la mujer sola, alucinada en la salida del hoyo uno, que probablemente, como lo dices tan bien, le hubiese encantado unirse a nuestro grupo, es la embajadora de Suiza !!!
Gracias por esta partida tan divertida y por darme la oportunidad de volver a vivirla con tu encantador texto.
El Comando.
By: CP on 08/03/2011
at 16:42
Tendremos que asegurarnos de poder contar con ella la próxima vez. Gracias a ti por compartir tus recuerdos. La maga
By: Concha Huerta on 08/03/2011
at 17:07
Que lindo Concha!!! Me lo has hecho revivir…. que divertido estuvo… hoy se lo traduzco a juana!!!!
La piel roja
By: RAB on 08/03/2011
at 17:07
Gracias por organizar un dia memorable. Sos genial!!
By: Concha Huerta on 08/03/2011
at 19:01
¡Qué fantástico! ¡A mitad de camino entre la realidad y el sueño! Pero las caipirinhas eran muy reales, ¿no? ¡Qué envidia!
By: Esther Zorrozua on 08/03/2011
at 19:10
Me levanté tan temprano que al principio pensé también que estaba soñando…. saludos
By: Concha Huerta on 08/03/2011
at 19:27
En los carnavales todos somos quien siempre (o nunca) quisimos ser. También vivimos con quien nunca (o siempre) quisimos estar. Un saludo,
S
By: auniveaudelamer on 15/03/2011
at 13:24