Ayer me enteré de una gran noticia. El sábado en las pistas de Budapest Javier Fernández revalidó su titulo como mejor patinador europeo por segundo año consecutivo, toda una hazaña para un joven de 22 años obstinado en alcanzar los laureles en un deporte que casi no se practica en España.
Siempre me ha gustado el patinaje, por la elegancia de sus movimientos, por la maravilla de ver a esos cuerpos haciendo piruetas imposibles sobre superficies heladas. Alguna vez me calcé unos patines y descubrí la dificultad de mantener el equilibrio sobre cuchillas. Imagino las horas de esfuerzo día tras día, año tras año, para alcanzar la seguridad y maestría de realizar los cuatro saltos cuádruples que han asegurado a Javier Fernández su segunda medalla de oro europea.
A Javier Fernández le sigo desde que quedó 14º en los Juegos Olímpicos del 2010, donde no había participado ningún español desde 1956. Un sueño para un niño que comenzó a patinar con su hermana a los seis años en una pequeña pista en la periferia madrileña. Me llamó la atención la agilidad y fuerza de un programa que combinaba potencia en los saltos y dramatismo en la danza. Me llamó la atención el nombre que comparte con mi sobrino americano, genio de números y fórmulas que sueña brazos articulados sobre superficies marcianas.
Enhorabuena Javier, espero que disfrutes de esta victoria como te mereces y que podamos volver a disfrutar de tu danza sobre el hielo de Sochi en los próximos Juegos Olímpicos. Jóvenes como tú nos animan a marcarnos metas que aunque parezcan imposibles se pueden conseguir con tesón y esfuerzo. Gracias por iluminarnos en tiempos que a veces nos parecen tan grises.
Javier Fernández gana el Campeonato de Europa en Budapest. Foto: Reuters.
Tener deportistas de ésta categoría ilusiona a cualquiera que ame el deporte y a su patria.
Un Abrazo Concha 🙂 .
By: joaquinsarabia on 21/01/2014
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