Cascáis, 7.30 am. Cajas apiñadas bajo una carpa blanca. Rida coloca tallos de hortensias en cubos de agua. Manuela monta la báscula. Inez cuelga los ajos que trenzó de madrugada. El señor Ruy cuenta brotes de perejil, menta y albaca entre nabos, berzas y tallos revestidos de puntillas blancas. Al lado, cajas de pimientos y tomates que desprenden aromas a tierra mojada. Sobra la tabla, panes de centeno y broas de maíz, huevos de yemas gemelas y quesos de cabra.
Mercado Saloio. Cada miércoles y sábado, las huertas visitan la plaza. Y el mar se vuelca en mostradores de piedra. Mejillones azulados, gambas de la costa, cajas rebosando tentáculos y tintas. Lourdes descama sardinas con manos expertas desde hace treinta años. Lubinas de lomo negro y plata, lenguados del Atlántico, quizá los mejores del mundo. Escogidos uno a uno en la cubierta de La Graciosa o la Santa María. La riqueza de un océano de aguas profundas y frías.
Mercado Saloio. Un paraíso para la buena gastronomía. Un mercado como los de hace cincuenta años.
Mercado Saloio de Cascáis. Fotos: C. Huerta.
Que maravilla ver reunidos tan buenos y apetecibles productos.
Un Abrazo Concha 🙂 .
By: joaquinsarabia on 20/08/2014
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